Los abrazos reducen el estrés, pero solo en mujeres, dice un estudio

Un interesante estudio de neurociencia en los Países Bajos concluyó que el contacto físico prolongado, como los abrazos, pueden reducir de forma significativa los niveles en la respuesta del cortisol, la hormona del estrés. Sin embargo, lo sorprendente es que, en las pruebas realizadas, no se observó ningún efecto amortiguador del estrés en los hombres.

El contacto físico prolongado reduce el estrés

La conclusión del equipo de investigadores del Instituto Holandés de Neurociencia (NIN) de la Real Academia de las Artes y las Ciencias de los Países Bajos (KNAW), es que los abrazos pueden ejercer poderosos efectos psicológicos en las mujeres.

Los resultados de este estudio fueron muy interesantes. Los abrazos más prolongados regularon la liberación de hormonas, especialmente el cortisol, que además afecta varias funciones cerebrales, como la memoria. Pero el efecto beneficioso de abrazar no generó los mismos efectos en los hombres.

Según Julian Packheiser, investigador en neurociencia conductual del Instituto Holandés de Neurociencia, no es sorprendente que el contacto físico ayude a regular diversas funciones corporales.

Estudios anteriores han demostrado que el contacto físico prolongado (un masaje, por ejemplo) podría regular la liberación de hormonas incidiendo en el sistema nervioso simpático. Pero un masaje no siempre es posible, indica, por lo cual el abrazo es una de las mejores soluciones, pues libera inmediatamente el estrés. Los contactos físicos prolongados liberan oxitocina, la llamada “hormona del amor”, la que reduce los niveles de cortisol.

Diferentes efectos en los hombres

Los investigadores no están seguros de por qué los efectos beneficiosos del contacto físico no son iguales en los hombres.

Packheiser señaló que, probablemente, influyen los factores sociales. Los hombres pueden sentirse incómodos con los abrazos. Para algunos, el contacto físico cercano puede sentirse antinatural o invasivo, lo cual podría incluso aumentar el estrés en lugar de aliviarlo.

Sin embargo, también podrían existir diferencias en la sensibilidad de los receptores táctiles en mujeres y en hombres, reflexionó.

Un abrazo romántico antes de un momento difícil

La investigación muestra que los abrazos de la pareja, antes de una situación de estrés, disminuyen la liberación de cortisol.

El estudio se centró en un abrazo a corto plazo entre parejas románticas antes de la inducción de estrés agudo. Las mujeres que abrazaron a su pareja antes de someterse a la prueba, mostraron una respuesta de cortisol reducida, es decir, menos estrés.

Deja un comentario sobre este interesante estudio o comparte estos resultados sobre los efectos de los abrazos para el estrés en tus redes sociales. A tus amigos les interesará saberlo, seguro que les parecen unos datos muy curiosos. ¿Habías imaginado alguna vez que un simple abrazo puede mejorar nuestra calidad de vida y reducir el estrés que acumulamos en nuestro día a día?